Ir a la universidad significa que enfrentará cambios significativos en un corto período de tiempo, lo que puede ser tan emocionante como intimidante.

 

Obtener apoyo

Estar en la universidad significa tener una nueva independencia; no significa que esté completamente solo. La universidad está llena de recursos, como profesores, tutores, consejeros y asesores, y siempre hay ayuda disponible. Su colegio o universidad también puede brindar una variedad de servicios en el campus, como servicios residenciales (para dormitorios y opciones de vivienda), asesoramiento sobre salud mental, centros de salud, centros religiosos, oficina de ayuda financiera, apoyo de información y tecnología, centros de carrera, servicios de cercanías y ¡mucho más!  Aunque, todavía depende de ti pedir ayuda. Si la primera persona a la que le preguntas no tiene una respuesta o no es muy útil, pídele que te dirija a alguien que pueda ayudarte o que conozca centros de recursos que tengan las respuestas que buscas.

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Administrar tu tiempo

Después de comenzar la universidad, es fácil despertarse tarde, comer comida chatarra y aprovechar su nueva independencia para ir a fiestas universitarias. Pero este tipo de comportamiento puede resultar en sesiones de tareas nocturnas, faltas a clases y posiblemente reprobar las clases.

 

El trabajo escolar es una prioridad, pero las actividades extracurriculares como trabajos y pasantías también son partes importantes de tu vida universitaria. Como resultado, tendrás que elegir regularmente dónde concentrar tu energía y tu tiempo.

 

Manejar tu vida social

Ir a la universidad también significa que experimentarás una nueva escena social. Si te vas a mudar a un nuevo lugar donde no conoces a nadie, ¡esta es una excelente oportunidad para hacer nuevos amigos y probar cosas nuevas! 

 

Hay una clara división entre la vida escolar y tu vida hogareña en la escuela secundaria, pero cuando vas a la universidad y vives en los dormitorios, estás constantemente rodeado de gente. Por lo tanto, es crucial equilibrar todas las partes de tu vida: estudiar, estar saludable e incluso dormir bien.

 

Lidiando con las finanzas

Con su nueva independencia, probablemente será responsable de su propio dinero y gastos. Por ejemplo, tendrá que abrir una cuenta bancaria, comprar su comida y recordar pagar sus facturas. Algunos estudiantes incluso son responsables de pagar la matrícula y los costos de alojamiento. Para administrar sus finanzas, deberá establecer un presupuesto y realizar un seguimiento de cuánto tiene en su cuenta bancaria.